El  Proyecto de Restitución Ambiental de la Minería del Uranio (PRAMU),  depende directamente de la CNEA, gestiona este programa y es responsable  – a nivel nacional - de la remediación ambiental de aquellos sitios  donde se desarrollaron actividades de la minería del Uranio.
Las  tareas de remediación en Malargüe alcanzaron un progreso del 35%,  realizadas íntegramente con fondos de la CNEA. Asimismo, un 15 % del  volumen de “colas de mineral” fueron movilizadas al lugar de gestión  final. Se denomina  “colas de mineral” a los vestigios del material extraído en las  instalaciones industriales, una vez finalizada su vida útil.
Al  concluir la obra la CNEA realizará un parque abierto a la comunidad.  Con el acuerdo de la Municipalidad de Malargüe, el predio incluirá su  parquización a fin de integrarlo a la trama urbana, con un formato  moderno y alusivo a la energía nuclear, trazado por senderos, miradores y  puntos de atracción donde se recorrerá la historia del Organismo y la  minería del uranio.
En  Malargüe, se llevaron a cabo actividades de procesamiento de minerales  de uranio entre 1954 y 1986. La producción fue de 752 t de U a partir  del mineral de las minas Huemul y Sierra Pintada, lo que generó 700.000 t  de colas de mineral ubicadas dentro del mismo predio.
El  proyecto de ingeniería de gestión de los pasivos ambientales contempla  su encapsulamiento y cuenta con la aprobación de la Provincia de Mendoza  y la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN). El área de gestión se ubica  dentro del predio.
Los  objetivos a alcanzar pretenden asegurar la protección del ambiente, la  salud y otros derechos de las generaciones actuales y futuras, haciendo  uso racional de los recursos. El PRAMU, en ese marco, se propone mejorar  las condiciones actuales de los depósitos de las colas de la minería  del uranio, considerando que si bien en la actualidad se encuentran  controlados, en el largo plazo se deben llevar a cabo distintas acciones  de remediación para asegurar la protección de las personas y el  ambiente.
 


 
