Problemas en algunas localidades, a raíz de las bajas temperaturas que se registraron en todo el país.
Hace bastante tiempo que decenas de empresas vienen sufriendo las restricciones al normal abastecimiento de gas. Los cortes obligaron (y aún obligan) al cese de actividades y la suspensión de empleados por tiempos variables.
Como esto se da en distintos cordones industriales -uno de los más afectados es Córdoba- y va rotando, no hay un impacto mediático significativo, lo que no disminuye la gravedad de la situación. Esto le ha permitido al gobierno negar los cortes o, al menos, mirar para otro lado. Hasta hace menos de dos meses, desde el gobierno nacional se aseguraba que no habría falta de gas porque la "recuperada" YPF aumentaría rápidamente la producción, además de aumentarse la importación de GNL.
Por supuesto que nada de eso ocurrió y en las últimas horas empezaron a aparecer problemas en algunas localidades, a raíz de las bajas temperaturas que se registraron en todo el país. El sur mendocino -en particular San Rafael- fue unas de las primeras zonas afectadas. Varios barrios de la importante ciudad se encontraron con súbitos cortes, al accionarse las válvulas de seguridad por baja de presión.
Estos cortes se registraron en las primeras horas de la noche, cuando el frío se hacía más intenso. Para colmo, el sistema de válvulas automáticas no es conocido por el usuario común, que no sabía qué hacer al ver que el fluido quedaba por completo cortado.
La zona sur de Mendoza se abastece desde el nodo La Mora, del gasoducto Centro Oeste operado por TGN, que carga en la Cuenca Neuquina. Desde La Mora, sucesivos gasoductos de 8", 6", 4" y 3" pulgadas llevan el fluido a Bowen, General Alvear, Colonia Alvear, Real del Padre, Cuadro Nacional,, San Rafael y Rama Caída.
En la zona de Cuyo se consume más GNC que gas residencial en los primeros meses del año. En el período enero/abril el consumo de gas en las residencias fue de 93.150.000 metros cúbicos; mientras que el de GNC fue de 94.582.000. No obstante, la situación cambia sustancialmente en invierno, donde el consumo típico de julio en el sector residencial es de 131.133.000 metros cúbicos, mientras el de GNC es de 25.009.000 metros cúbicos.
